El Sistema Nervioso Parasimpático: ¿Qué es?, Funciones y mucho más

La anatomía de nuestro cuerpo es algo muy interesante y que genera bastante curiosidad. Nuestro Sistema Nervioso está compuesto por diferentes subsistemas que se encargan de que nuestro organismo funcione de forma correcta, si no es así se pueden producir enfermedades o diferentes problemáticas.

 En este artículo, conoceremos qué es el Sistema Nervioso Parasimpático, porqué es tan importante en nuestra vida, cuáles son las funciones y qué podemos hacer para activarlo. Seguro que cuando leas este artículo le darás mucha importancia.

Sistema Nervioso Parasimpático
Sistema Nervioso Parasimpático

Sistema Nervioso Periférico

El Sistema Nervioso Periférico es la parte del Sistema Nervioso que está formado por neuronas que conectan el Sistema Nervioso Central y la Médula Espinal con el resto del cuerpo. Gracias a él nuestro cerebro puede enviar y recibir información sobre la interacción con el medio, acciones necesarias para llevar a cabo una acción y recibir información sensitiva y actuar acorde a ella.

Dentro de este sistema se encuentra el Sistema Nervioso Autónomo, también conocido como involuntario o vegetativo (inverso al Sistema nervioso Somático que controla funciones voluntarias).

Evaluacion mental - CogniFit
Test Cognitivo Online de CogniFit: Evalúa de forma clínica y rápidamente tu funcionamiento cerebral, identifica debilidades y fortalezas cognitivas. Los resultados que proporciona este test neuropsicológico son muy útiles para ayudar a determinar si los cambios cognitivos que experimenta una persona son normales, o pueden ser reflejo de algún trastorno neurológico. Obtén tus resultados en menos de 30-40 minutos. CogniFit es la herramienta de evaluación cognitiva más recomendada y utilizada por profesionales.

El Sistema Nervioso Autónomo es la parte del Sistema Nervioso Central, como sus nombres secundarios indican, se encarga de las funciones involuntarias como por ejemplo: ritmo cardíaco, metabolismo, reflejos, es decir aquellas funciones de las que no somos conscientes, y sin las cuales sería imposible vivir.

Para ello inerva los músculos cardiacos (responsables del funcionamiento del corazón), la musculatura lisa (responsables del movimiento) y las glándulas exocrinas (responsables del feedback y control del organismo). Por tanto, este sistema es capaz de modificar la actividad de estos músculos y glándulas en respuesta a la información que proviene de niveles superiores del cerebro (emociones y estímulos del entorno).

El Sistema Nervioso Autónomo se divide en dos ramas:

  • Rama Simpática: Permite los procesos catabólicos o de gastos de energía.
  • Rama Parasimpática: Permite los procesos anabólicos o de reserva de energía.

Diferencias entre el Sistema Nervioso Simpático y Parasimpático

El Sistema Nervioso Parasimpático complementa al Sistema Nervioso Simpático, ya que tienen funciones opuestas. El Sistema Nervioso Simpático promueve el gasto de energía y activa el organismo, mientras que el Sistema Nervioso Parasimpático incrementa las reservas. Gracias a un mecanismo de homoestasis o feedback, ambos consiguen trabajar de forma complementaria y hacer que nuestro cuerpo responda de forma adecuada a las diferentes situaciones.

Generalmente, suelen tener funciones opuestas en los mismos órganos, la siguiente imagen lo resume de una forma muy gráfica y muy interesante.

Sistema Nervioso Parasimpátivo
Sistema Nervioso Parasimpátivo

Qué es el Sistema Nervioso Parasimpático: Definición, Anatomía y Funciones 

El Sistema Nervioso Parasimpático tiene su origen en el Tronco del Encéfalo. Es el responsable de la regulación de los órganos internos, actividades como la digestión y actividades en reposo y descanso.

Neuroanatomía del sistema nervioso parasimpático

Las fibras neuronales parten del SNC, formado por el tronco del encéfalo y la médula espinal y viajan por nervios craneales y los nervios espinales sacros (principalmente por el nervio vago). Tras esto llegan a ganglios, situados en las vísceras o sus proximidades. Esto ocurre diferente en la rama Simpática, ya que en ésta las sinapsis entre neuronas preganglionares y postganglionares en ganglios localizados muy cerca de la médula, lejos generalmente los órganos diana.

En los Ganglios Parasimpáticos, las Neuronas Preganglionares sinaptan con las postganglionares y liberan acetilcolina en ambas neuronas.

En la rama Simpática, el neurotransmisor dependerá de si la neurona es Preganglionar o Postganglional. En el primer caso liberará noradrenalina y en el segundo acetilcolina.

Las fibras neuronalessalen del SNC (tronco y médula) y viajan por nervios craneales y por nervios espinales sacros (sobre todo el nervio vago). Llegan a ganglios que se encuentran situados en las vísceras o muy cerca de ellas; a diferencia de la división simpática que hacía las sinapsis entre neuronas preganglionares y postganglionares en ganglios localizados muy cerca de la médula, lejos generalmente los órganos efectores.

En los Ganglios Parasimpáticos, las Neuronas Preganglionares sinaptan con las Postganglionares y liberan acetilcolina.

Funciones del Sistema Nervioso Parasimpático. ¿Qué actividades controla?

Podríamos decir que la principal función del Sistema Nervioso Parasimpático es la de permitir un estado de relajación o reposo, nos permite recuperar energía y tener un sentimiento de relajación, pudiendo volver a activarnos si la situación lo requiere. También está implicado en el proceso de digestión.

Además, tiene otras muchas funciones, que implican diferentes órganos o partes de nuestro cuerpo, que a su vez están relacionados con esta sensación de relajación.

  • Aparato cardiovascular: En estado de reposo, se produce una disminución de la tensión arterial y un aumento de la circulación de la sangre. Por tanto, disminuyen los latidos por segundo y la presión que ejerce la sangre en las arterias, fluyendo por tanto con más lentitud.
  • Aparato gastrointestinal: El sistema parasimpático permite el correcto funcionamiento de la digestión. En situaciones de tensión, toda la energía disponible se utiliza para atender las demandas del entorno. Sin embargo, en situaciones en las que estamos relajados, toda esta energía se utiliza para los procesos de descomposición de alimentos en aparato gastorintestinal. Esta acción, permite que el cuerpo tenga reservas para hacer frente a actividades que precisan de grandes esfuerzos. Por otra parte, aumenta la secreción de saliva, y la de enzimas y ácidos gastrointestinales.
  • Aparato genitourinario: Relajación de esfínteres, contracción del detrusor y aumento de la secreción de orina.
  • Aparato respiratorio: El Sistema Nervioso Parasimpático provoca en los bronquios basoconstriccón. Permite reducir la entrada de oxígeno, contribuyendo a que la energía del cuerpo se encuentre dentro de la normalidad.
  • Aparato visual: Cuando estamos nerviosos o activados, necesitamos captar toda la información posible sobre el medio o sobre un estímulo en concreto, por lo que la pupila se dilata. Por el contrario, cuando estamos relajados, la pupila de contrae ya que no es necesario captar demasiada información del medio, lo que también se denomina miosis.
  • Aparato sexual: el Sistema Parasimpático, está involucrado en la exitación sexual, es decir en la erección del pene y del clítoris.

Como resumen, el sistema nervioso parasimpático permite el reposo, ayudándonos a ahorrar energía, y los procesos digestivos.

Además, gracias a su función anabólica, el sistema nervioso parasimpático juega un papel fundamental en el mantenimiento de la salud mental y física. Este sistema ayuda al cuerpo a calmarse y volver a un estado de reposo, tras una reacción de estrés en el cuál se eleva la presión arterial, dilata las pupilas y desvía la energía de otros procesos corporales para luchar o huir.

Sistema Nervioso Parasimpático: ¿Qué problemas se pueden generar por un mal funcionamiento del Sistema Nervioso Autónomo?

Como ya hemos dicho, el Sistema Nervioso Autónomo se divide en la rama Simpática y en la Parasimpática. Los problemas en este sistema o en alguna de sus partes pueden dar lugar a diferentes problemáticas o enfermedades como por ejemplo:

  • Dolores de cabeza, incluyendo pérdida de memoria y dificultad para hablar.
  • Afecciones en el corazón y las arterias.
  • Trastornos en el sistema respiratorio.
  • Fibromialgia, caracterizada por dolor muscular crónico, sin origen conocido.
  • Disfunción eréctil.
  • Esclerosis múltiple, enfermedad degenerativa del sistema nervioso. Afecta principalmente a la mielina y se manifiesta con parálisis de las extremidades inferiores, hormigueo y pérdida de la sensibilidad entre otros.
  • Atrofia multisistémica, enfermedad degenerativa  con características similares al Parkinson.
  • Disautonomía familiar, enfermedad hereditaria, degenerativa, y cuyos síntomas son sudoración excesiva e indiferencia al dolor.
  • Diabetes, aunque no es una enfermedad que incluya de forma exclusiva el Sistema Nerviso Autonomo, ya que se trata de un déficit en la generación de insulina. Sin embargo, la diabetes puede causar daño a los nervios, afectando los nervios simpático, parasimpático, sensorial y motor.

¿Cómo podemos activar el Sistema Nervioso Parasimpático?

Como norma general podemos decir que todas las actividades que conlleven una disminución de la activación, son propias del Sistema Nervioso Parasimpático. Algunas de estas actividades son:

  • Ejercicios de relajación, respiración y meditación. Entre sus múltiples ventajas están la disminución de la presión arterial, el aumento del oxígeno disponible y la disminución del estrés.
  • Actividades que nos resulten agradables. La realización de actividades que producen una sensación de disfrute o goce, estimula nuestro Sistema Nervioso Parasimpático.
  • Reducir el estrés.
  • Realizar ejercicio físico.
  • Tomar infusiones relajantes, disminuyen la activación.
  • Relaciones satisfactorias, que impliquen sensaciones de bienestar y de las cuales disfrutemos.

¿ Cómo podemos cuidar nuestro Sistema Nervioso?

El Sistema Nervioso forma parte de nuestro cuerpo y, por tanto debemos de preocuparnos por su estado y cuidarlo. Al igual que pasa con otras partes del cuerpo, podemos prevenir y evitar enfermedades que derivan en problemas en nuestro cuerpo, causadas por el Sistema Nervioso. A continuación exponemos una serie de consejos o pautas que pueden ayudarnos a vivir de una forma más saludable.

1- Hábitos Saludables: deporte y alimentación. Parece el consejo más típico en cuanto a cuidados de salud se refieren, sin embargo es muy importante. Es fundamental activar nuestro cuerpo con ejercicio aeróbico al menos dos o tres veces por semana, aumentando nuestro ritmo cardiaco al menos veinte minutos. Además, tiene un efecto relajante. También debemos aportar todos los nutrientes que nuestro cuerpo necesita, realizar cinco comidas al día, intentar reducir dulces y azúcares procesados etc.

3- Dormir y descansar. Se recomiendan ocho horas diarias, sin embargo depende de la persona (hay gente que se siente descansado con menos horas y otras con más). Mantener una higiene del sueño adecuada, poca luz, sin ruidos ni extresores externos. El sueño nos debe aportar sensación de descanso y energía para desarrollar nuestras funciones durante todo el día.

4- Reducir la Ansiedad y el Estrés. Éstos son factores que activan nuestro Sistema Nervioso Simpático, lo que nos hace estar activos, nerviosos, y nos mantiene alerta. Disminuir la ansiedad y el estrés en situaciones dónde no es necesario esta activación, nos ayudará cuidar nuestro Sistema Nervioso y prevenir problemáticas como por ejemplo ataques de ansiedad, insomnio, frustración etc.

5- Relaciones saludables. Las personas somos seres sociales, y las relaciones forman parte de nuestro día a día. Tener relaciones satisfactorias, que nos hagan sentir bien, sin añadir estrés o dificultades importantes a nuestra vida, nos ayudará a disminuir la ansiedad y a sentirnos mejor.

Referencias Bibliográficas

Carlson N. (2007). Fisiología de la conducta. Madrid: Pearson-Addison Wesley.

Kandel, E.R.; Schwartz, J.H. & Jessell, T.M. (2001). Principios de neurociencia. Cuarta edición. McGraw-Hill Interamericana. Madrid.

Snell, R.D. (1997). Sistema nervioso autónomo. Neuroanatomía clínica. Buenos Aires: Panamericana.

Responde