Nos estamos separando: ¿Cómo ayudar a mis hijos a entender el divorcio sin que sufran?
Nos estamos separando ¿Cómo puedo ayudar a mis hijos para que no sufran? Un divorcio es una situación difícil y complicada para toda la familia, pero sobre todo, los que me más suelen sufrir ante una separación parental, son los propios hijos. Algunas veces, cuando una pareja con hijos toma la decisión de separarse, la relación entre los progenitores termina muy deteriorada. De pronto, nuestros pequeños se encuentran en medio de un hogar roto, en el que viven muy de cerca las peleas y gritos de sus padres atacándose el uno al otro. Incluso, es frecuente que los propios padres pongamos a nuestros hijos de mensajeros o árbitros en nuestras discusiones de pareja. Ten en cuenta que los niños suelen ser los más vulnerables ante una separación, todo lo que hagáis para perjudicaros mutuamente, queriendo, o no, terminará afectando a vuestros pequeños.
No olvides que, aunque para vosotros, la separación sea la oportunidad para terminar con una relación que no funciona, para vuestros hijos, la separación de sus padres supone dejar de criarse al lado de las dos personas que más ama y necesita: su papá y su mamá. Por ello, es importante saber cómo afrontar una ruptura, descubre en este artículo cómo ayudar a tus hijos a entender el divorcio de sus padres. En esta pequeña guía encontrarás los consejos de la psicóloga Vivian Randez. Descubre cómo separase sin dañar o perjudicar a tus hijos, cómo actuar ante una separación, sus consecuencias, la importancia de llevar una buena comunicación, qué es lo que nunca debes hacer si quieres ayudar a tus hijos, etc…
La separación parental: Ayudar a su hijo/a durante el divorcio
Los padres, por su condición de hombre y mujer tienen dos funciones muy importantes cuando forman una familia, una como cónyuges (marido y mujer) y otra como padres.
Si la relación entre los cónyuges no funciona bien y no son felices viviendo juntos, lo mejor es que termine. En general, el divorcio suele ser bastante traumático para los hijos, pero si la pareja no funciona, el no separarse y vivir una farsa supondría un engaño y a fin de cuentas, los hijos sufrirían mucho más viendo las discusiones diarias y la falta de cariño entre sus padres.
El divorcio no tiene por qué repercutir en el correcto desarrollo de los hijos, aunque, es importante tener en cuenta una serie de pautas que evitarán que los hijos puedan llegar a entender el divorcio de sus padres como un suceso traumático en sus vidas.
Hay que asumir y aceptar que el niño va a tener que pasar por la separación de sus padres, y que serán momentos duros para todos, pero hay muchas cosas que podemos hacer para ayudar a que nuestro hijo no sufra en este trance, y que nuestro divorcio tenga las mínimas consecuencias en su vida y en su desarrollo.
Consecuencias de la separación parental en los hijos
Las consecuencias que tenga la separación parental en los hijos, dependerá mucho de la madurez y edad del pequeño. Es probable que se enfrenten a estas preguntas: “Ahora que mis padres se han separado, ¿dejarán de quererme?” ¿Se han separado por mi culpa?…”
Algunos de los efectos que el divorcio o separación parental puede ocasionar en nuestros hijos son:
- Bajada en el rendimiento académico.
- Ansiedad y estrés durante la separación: Suelen sentir miedo y angustia.
- Es normal que lloren con frecuencia, hay que dejarles que se expresen y entender su situación. Llorar tiene beneficios psicológicos.
- Es normal que insistan mucho para tratar que sus padres no se separen. Hay que tratar que lo acepten cuanto antes para que puedan superarlo.
- Problemas de sueño, e incluso insomnio infantil.
- En algunos casos, el niños puede sentirse culpable de la separación, hay que vigilar muy de cerca los síntomas que podrían indicar depresión infantil.
- El niño puede experimentar algún tipo de regresión infantil.
- La separación de sus padres, puede deteriorar el autoconcepto de los niños.
- Dificultades sociales.
- Dificultades emocionales como depresión, miedo, ansiedad…
- Problemas de conducta.
- Dificultades para creer en la continuidad de la pareja, y, por lo tanto, menos implicación en ésta, etc…
¿Cómo actuar con nuestros hijos durante una separación?
¿Cómo comunicamos una separación a nuestros hijos? Es importante la buena comunicación entre las partes de la familia cuando se trata de una situación crítica como esta, de un cambio tan brusco dentro de la unidad familiar. Los hijos tienen que ser informados sobre la situación de forma adecuada en función de su edad. No meter al hijo dentro de la batalla, no hablar mal el uno del otro delante del niño, concederles tiempo para que asuman este cambio, para que se sientan seguros. Es importante que sean los padres los que hablen con el niño sobre esto, y no terceras personas.
Aquí te dejamos unos consejos para hablar de divorcio con los hijos.
- Explica a tu hijo que papa y mama ya no pueden y no quieren vivir juntos y que a partir de ahora vivirán en casas diferentes.
- Papá y mamá han tomado esta decisión porque creen que es lo mejor para todos. Dejar bien claro que los hijos no han tenido nada que ver en la separación. Los padres no se han separado porque el o ella se haya portado mal.
- Hablad con vuestros hijos a cerca de la separación sin culpabilizar a nadie. Ni a papá ni a mamá. Es importante no implicar a vuestros hijos en vuestras peleas.
- No debemos intentar poner a nuestro hijo de nuestra parte, en medida de lo posible, hay que tratar de solucionar los conflictos que surgen con nuestra pareja sin involucrar a nuestros hijos.
- Asegurad al niño o niña que ambos padres le siguen queriendo igual que antes, y que va a ver tanto a uno como al otro, que aunque ya no viváis todos juntos, nadie se va a separar de el o ella. Puede contar con cualquiera de los dos para cualquier cosa que necesite.
- Insistid mucho en cuantas personas se preocupan por el, y quieren que sean feliz. La idea es tratar de eliminar ese miedo a que se sienta solo o abandonado. Animadle a que siempre que le preocupe algo, o se sienta triste hable con cualquiera de los dos papás.
- Mantened constantes los aspectos habituales de su hijo: domicilio, entorno, relaciones con los padres, colegio, horarios, etc…
- El amor hacia los hijos se demuestra compartiendo tiempo con el o ella, anudándole, escuchándole… Tal vez te convenga conocer el Efecto Pigmalión y la fuerza que tienen tus palabras en tus hijos.
- Es importante no caer ne la sobreprotección, debemos seguir tratándolo igual, no es bueno concederle todos los caprichos y deseos. Podremos terminar criando a un pequeño delincuente: El síndrome del emperador.
- Trata de proteger las opiniones positivas que vuestro hijo tenga de ambos padres.
- Facilita la relación del niño con la otra parte, ser flexible en horarios, etc…Está claro que el divorcio no es bueno, y muchas veces, dependiendo de cómo se dé la separación puede significar un dolor difícil de superar para los hijos. Sobre todo hay que evitar meter a los niños dentro del conflicto. Hay que saber diferenciar entre la pareja y el papel del padre y/o madre.
No cabe duda que a veces la mejor solución para el hogar y para todos los componentes del núcleo familiar es terminar la relación y por tanto la separación de los cónyuges. Para los niños la separación de los padres siempre va a ser dolorosa pero sus efectos serán distintos dependiendo de como se realice el proceso de separación y cómo se comunique a los hijos. Si una separación se lleva a cabo de forma adecuada, la adaptación para los niños será mucho más rápida y los efectos no serán tan graves que si una separación se realiza de forma traumática.
Por ello, es fundamental que los padres actúen de forma correcta con sus hijos durante el proceso de separación, sin olvidar que pareja e hijos son dos cosas diferentes, y como hemos dicho antes, el éxito o fracaso en uno no implica el éxito o fracaso en el otro. No existen muchas separaciones fáciles pero si muchos padres que no se ponen de acuerdo entre ellos y esto es realmente lo que hace que el niño lleve peor este proceso y por tanto tenga efectos negativos para nuestro pequeño o pequeña
Psicóloga especialista en Neuropsicología infantil. Apasionada de la primera infancia con conocimientos en Atención Temprana con un enfoque multidisciplinar, además de experta en análisis e interpretación de técnicas productivas gráficas y con conocimientos en Grafología.