¿Qué es la ansiedad? ¿Qué significa tener ansiedad? Una completa guía
“Estoy muy nervioso, me cuesta respirar”. “Me encuentro excesivamente agitado y no sé por qué”. ¿Te suenan estas frases? ¿Deseas saber qué se esconde tras ellas? ¿Qué es la ansiedad? En este artículo te contaremos todo lo que necesitas saber sobre esta emoción. Además, te daremos 15 consejos para superarla. Sigue leyendo y descubre con detalle qué es la ansiedad.
¿Qué es la ansiedad?
Frecuentemente escuchamos hablar sobre el concepto de la ansiedad en todo tipo de circunstancias; en las noticias, al hacer la compra, en el trabajo, en las relaciones interpersonales, en el deporte, etc. Está presente tanto en los medios de comunicación como en las conversaciones cotidianas.
A menudo se emplea incorrectamente y de forma indiscriminada. Esto dificulta que sepamos con precisión qué es la ansiedad. Sin embargo, la definición de ansiedad se puede diferenciar de otras que se emplean en contextos parecidos, como la de estrés o depresión.
La ansiedad significa “estado emocional desencadenado por la anticipación de peligros o amenazas”. Es una emoción básica y no primaria (como la alegría, la ira o la tristeza) porque carece de unas características propias. Por ejemplo, comparte rasgos con el miedo, como la activación de pensamientos desagradables relacionados con nuestra seguridad.
Tener ansiedad quiere decir que nos enfrentamos a una reacción emocional compuesta por una confusa mezcla de sentimientos y sesgos cognitivos sin encontrarse presente un estímulo específico; como una araña o un precipicio justo delante de nosotros.
Todos sentimos ansiedad en nuestras vidas, aunque no siempre se convierte en un problema que nos cause malestar. Los síntomas de la ansiedad son habituales en una sociedad tan ajetreada como la nuestra.
A continuación profundizaremos tanto en sus aspectos negativos como en los más beneficiosos para nosotros. Descubre cómo gestionar esta emoción para mejora tu calidad de vida.
Diferencia entre ansiedad y estrés
El concepto de ansiedad suele mezclarse con el de estrés. Ambos procesos son inherentes a nuestro día a día, nos preparan para afrontar nuestros retos, pueden dar lugar a problemas de salud, producen una elevada activación fisiológica y se desencadenan ante situaciones similares; como la época de exámenes.
No obstante, estas palabras no son sinónimos. La ansiedad es una emoción y el estrés no. Asimismo, el estrés suele ser desencadenado por un estímulo que se encuentra presente mientras la ansiedad no.
Ansiedad: Causas
Para saber con claridad qué es la ansiedad es preciso tener en cuenta que interactúa con otros rasgos de nuestra personalidad (neuroticismo o introversión, según Eysenck), como los que heredamos o los debidos al ambiente. Son diversos los factores que nos conducen a afrontar más o menos esta emoción.
La explicación de la ansiedad es multicausal. Sus diversos componentes y desencadenantes interactúan entre ellos e inciden en nuestra interpretación de la ansiedad. Estos son los orígenes que explican las causas más frecuentes de ansiedad:
- Aprendizaje: A lo largo de la vida, vamos aprendiendo por nuestra experiencia personal, a través de comentarios de otras personas o por observación (teoría del aprendizaje social) que ciertas situaciones, como estar en paro, son amenazas o peligros para nosotros. Por ejemplo, en la infancia pueden establecerse firmes asociaciones de ideas que produzcan esta reacción emocional mucho tiempo después. De hecho, este periodo es importantísimo para nuestro aprendizaje emocional.
- Esquemas mentales y pensamientos desagradables: Pensar en situaciones que producen malestar, independientemente de si son pasadas, presentes o futuras, acentúa la percepción de los peligros o amenazas. No importa si son reales o ficticias, lo relevante son los procesos cognitivos del individuo.
- Expectativas de peligros o amenazas: Contemplar la posibilidad de que pueda ocurrir un evento desagradable, como una enfermedad, la posibilidad de ser criticado por otras personas, entrar en contacto con un animal peligroso o una pérdida económica, desencadena este estado emocional.
- Percepción de alteraciones fisiológicas: Si notamos algo inusual en nuestro cuerpo, como taquicardias o temblores y desconocemos su porqué, es muy probable que se produzcan reacciones ansiosas. Por otra parte, el consumo abusivo de alcohol, sustancias alucinógenas u otros elementos que repercuten en nuestra activación fisiológica, son parte de los responsables de este estado.
Ansiedad: Consecuencias
¿Qué es la ansiedad? Cuando nos enfrentamos a la ansiedad, nuestro cuerpo reacciona con el fin de prepararnos para resolver un problema. Generalmente, no tiene efectos adversos. Nos ayuda a dar lo mejor de nosotros mismos en situaciones como las entrevistas de trabajo. No obstante, sentir ansiedad con demasiada frecuencia da lugar a consecuencias como éstas.
- Problemas de memoria
- Irritabilidad
- Fatiga
- Insomnio
- Depresión
- Enfermedades cardiovasculares
- Debilitamiento del sistema inmunológico
- Problemas digestivos
- Cambios en el metabolismo
- Problemas sexuales
- Dificultades en las relaciones sociales
Tipos de trastornos de ansiedad y sus características
¿Qué es la ansiedad clínica y la ansiedad general? La diferencia entre la ansiedad clínica y la habitual se basa en una cuestión de grado. Es decir, hay una línea muy difusa que separa una reacción emocional saludable en nuestras vidas de la definición de la ansiedad negativa relacionada con serios problemas psicológicos. No obstante, los trastornos se pueden detectar gracias a herramientas como los cuestionarios.
¿Qué es la ansiedad clínica? Es la ansiedad patológica que provoca respuestas desadaptativas, como encarcelarse en casa debido a la ansiedad social. De hecho, los trastornos de ansiedad son unas de las psicopatologías más habituales. A continuación te comentamos información sobre los trastornos de ansiedad y sus tipos según el DSM V.
1- Trastorno de ansiedad generalizada
¿Qué es el trastorno de ansiedad generalizada? Las personas que lo padecen están extremadamente preocupadas y reaccionan con ansiedad ante una diversa variedad de estímulos, no solo ante los comunes. Sus preocupaciones son persistentes, irracionales, intensas y entorpecen el funcionamiento de las personas en diversas áreas de sus vidas. Para diagnosticar este trastorno, los síntomas han de presentarse durante seis meses por lo menos y como mínimo la mitad de los días.
2- Fobias específicas
Las fobias son temores desorbitados ante estímulos determinados. Existe una gran variedad de fobias específicas (cuyo objeto son situaciones u objetos determinados); nictofobia, hematofobia, fobia a las alturas, fobia a los aviones, etc.
3- Agorafobia
Es un miedo irracional a lugares públicos por temor a quedarse atrapado en ellos. Tiene lugar en sitios como las calles, teatros, mercados o parques. Los agorafóbicos temen no poder escapar de estos lugares, no los espacios en concreto. En los casos más graves, las personas que padecen este trastorno pueden llegar a encerrarse en sus casas.
4- Ansiedad social
Es una fobia caracterizada por el miedo desmedido a las relaciones con otras personas. Las personas que la sufren sienten una ansiedad desproporcionada en situaciones como hablar en público, a los comentarios de otras personas o a entablar conversaciones con desconocidos.
5- Trastorno de pánico
Provoca episodios inesperados y reiterados ataques de pánico (o crisis de angustia) que empiezan de forma súbita. Entre sus principales síntomas se encuentran síntomas como miedo a morir o a enloquecer, palpitaciones, sudoración, dificultades respiratorias, dolor torácico, mareos, escalofríos, parestesias, visión borrosa, desrealización, sacudidas o náuseas. Duran aproximadamente diez minutos. Las personas que lo padecen suelen desarrollar ansiedad ante los lugares o circunstancias que asocian a sus ataques.
6- Trastorno de ansiedad inducido por sustancias o medicamentos
¿Qué es el trastorno de ansiedad inducido por sustancias? Se caracteriza principalmente por la aparición de crisis de ansiedad relacionadas con el consumo de sustancias de cannabis, alcohol, cocaína, ansiolíticos, alucinógenos o cualquier otra sustancia capaz de provocar ansiedad.
7- Trastorno de ansiedad por separación
¿Qué es el trastorno de ansiedad por separación? Consiste en reaccionar con una ansiedad excesiva ante la separación de una persona con la que se mantiene un profundo vínculo o del hogar. Son respuestas desproporcionadas que producen un intenso malestar en los afectados y son notablemente incapacitantes para ellos.
8- Mutismo selectivo
Este trastorno se produce exclusivamente en edades tempranas. Radica en la incapacidad recurrente para hablar en presencia de otras personas en situaciones determinadas. En cambio, los niños afectados hablan y se desenvuelven con total normalidad en otros contextos como el familiar.
Cabe destacar que la ansiedad se encuentra presente en gran parte de los trastornos psicológicos u orgánicos. Por ejemplo, es habitual en la depresión o en los trastornos alimentarios. No obstante, aquí nos hemos centrado en los trastornos cuya principal característica es la ansiedad.
Ansiedad: Ventajas y desventajas
Cuando hablamos sobre qué es la ansiedad, generalmente nos centramos en sus aspectos más negativos. En este apartado aportaremos una visión más optimista sobre esta emoción. En realidad, la ansiedad bien controlada es un regalo que nos hace nuestro cuerpo.
Ventajas
- Nos obliga a prestar atención a los elementos importantes: mejora nuestra concentración (si es bien gestionada) y agudiza nuestros sentidos. Cuando pensamos en la definición de ansiedad, solemos pasar por alto efectos tan positivos como este y nos centramos en la confusión que en ocasiones provoca.
- Nos avisa con antelación de un peligro: ¿Qué pasaría si esta reacción emocional no te presionara para evitar suspender? Afortunadamente, antes de un examen o de cualquier situación similar, nuestro cuerpo nos avisa de que ya es la hora de comenzar a estudiar.
- Nos obliga a poner en marcha nuestros recursos: Esta emoción nos ha ayudado desde tiempos inmemoriales a luchar para sobrevivir y nos ayuda a tomar decisiones mejores.
- Mejora nuestro rendimiento: Nos impulsa a resolver el problema que dé lugar a nuestras expectativas de miedo o amenaza. A pesar de su mala fama, la ansiedad significa poder contar con un potente impulso para ajustarse a los cambios.
Desventajas
- Deteriora la salud mental y física: Como hemos visto en el apartado anterior, puede dar lugar a trastornos notablemente desadaptativos.
- Perjudica las relaciones sociales: Una ansiedad descontrolada nos empuja a dejar de interactuar con otros individuos o a comportarnos de forma inusual con ellos. Asimismo, el desconocimiento de qué es la ansiedad por parte de varias personas, dificulta la comunicación con ellas.
- Disminuye el rendimiento: A pesar de que una ansiedad controlada nos impulse a enfrentarnos a los retos, si es excesiva también puede afectarnos a la hora trabajar, interaccionar con la gente o realizar actividades cotidianas.
15 consejos para superar la ansiedad
Una vez que tengamos claro qué es la ansiedad, estamos listos para aprovecharnos de sus beneficios y evitar sus inconvenientes. Aquí te daremos varias recomendaciones para controlar la ansiedad.
1. Recuerda que la ansiedad está en tu cabeza
Es complicado pensar en esto cuando nos invade esta emoción. Sin embargo, con un poco de esfuerzo podemos ser conscientes de que está en nuestro interior y nosotros podemos controlar la ansiedad. Comprender este mecanismo y saber que es transitorio es beneficioso para reaccionar más tranquilamente ante él.
2. Analiza qué es lo que te produce ansiedad
Conocer lo que provoca nuestras emociones y cómo actuamos ante ellas nos permite entendernos mejor y desarrollar nuestra inteligencia emocional. Esto no implica dar vueltas a los pensamientos que producen malestar, se trata de saber qué nos hace sentir esta emoción para lograr controlar este estímulo.
3. No seas demasiado crítico contigo mismo
Es vital reflexionar sobre lo que hacemos, tanto sobre nuestros méritos como sobre nuestras tareas pendientes. Pero también es importante que no nos juzguemos de una forma excesivamente dura.
Es importante que nos hablemos a nosotros mismos con delicadeza. Es decir, es preciso evitar pensamientos como “soy un inútil y un blando” o “nunca seré capaz de enfrentarme a mis miedos”. Pensar “tranquilo, puedes lograrlo” o “ánimo, estás progresando mucho” mejorará nuestra autoeficacia, nuestro autocontrol y nuestra autoestima.
4. Adopta una actitud positiva
Es difícil ver el lado bueno de situaciones que nos agobian profundamente. Existen hechos que no podemos cambiar. Sin embargo, sí podemos decidir cómo actuaremos en la mayoría de las situaciones y siempre seremos capaces de intervenir sobre nuestra manera de reaccionar ante cualquier circunstancia.
5. Actúa ante las situaciones que te preocupan
Es elemental pensar antes de actuar. No obstante, cuando dedicamos demasiado tiempo a dar vueltas a las posibles soluciones de un evento determinado o nos centramos en sus aspectos negativos, nos causamos un malestar innecesario. Hay varias técnicas de resolución de problemas que nos posibilitan a enfrentarnos a cualquier adversidad.
6. Comparte tus emociones con tus seres queridos
La educación emocional es una parte esencial en nuestro aprendizaje. Tal vez nunca nos hayan enseñado a expresar nuestros sentimientos o nos cueste especialmente. Pero nunca es tarde para comenzar a expresar cómo nos sentimos y a comentar nuestras experiencias con los demás. Necesitamos desahogarnos y ser apoyados. No dudes en hablar con tus seres queridos si estás preocupado por algo.
7. Dedica tiempo a tus actividades preferidas
Puede que pienses que esto es imposible con el ritmo de vida que llevas. No obstante, es fundamental reservar un rato al día para ser más feliz. Enfrascarse demasiado en el trabajo o en atender las necesidades de otras personas y olvidarse de uno mismo es totalmente contraproducente para nuestro rendimiento.
8. Mantén hábitos saludables
Ya te habrán comentado en diversas ocasiones la importancia de dormir bien, alimentarse adecuadamente, no pasar demasiadas horas delante del ordenador, etc. Sin embargo, es esencial que cuidemos nuestra salud física y mental para encontrarnos realmente bien. No podemos imaginar hasta qué punto influye en nuestro estado de ánimo llevar una vida sana.
9. Cuida tu respiración
La respiración abdominal puede disminuir considerablemente la ansiedad. Respira pausada y profundamente repetidas veces cuando notes los síntomas de la ansiedad y verás cómo te encuentras mejor.
10. Practica mindfulness
Está técnica de meditación está en auge últimamente. Nos ayuda a ser tomar conciencia del momento presente. Mejora nuestra atención y nos permite alcanzar el equilibrio y el bienestar.
11. Prueba la relajación progresiva de Jacobson
Esta técnica nos ayuda a reposar e interviene directamente sobre todo nuestro cuerpo, relajando cada parte de forma individualizada. Reduce efectivamente tanto el malestar físico como el psicológico que la ansiedad produce.
12. Apóyate en las TIC
El vertiginoso progreso de la tecnología también nos aporta avances para cuidar nuestra salud mental. Por ejemplo, existen apps que nos ayudan a reducir nuestras preocupaciones, nos ponen en contacto con un experto o proponen ejercicios para mejorar nuestra gestión de las emociones día a día.
13. Busca información sobre la ansiedad en fuentes fiables
Muchos medios de comunicación y parte de nuestros conocidos no saben con certeza qué es la ansiedad y recomiendan soluciones poco eficaces para tratarla o incluso niegan que exista. Es preferible consultar las palabras de personas bien informadas.
14. Ignora los prejuicios de la gente que no sabe qué es la ansiedad
El significado de ansiedad es desconocido por muchas personas. Afirman despreocupadamente “tener ansiedad quiere decir ser débil o desear llamar la atención”. No obstante, su actitud se debe a su ignorancia respecto a este tema.
15. No te autodiagnostiques
Si crees que puedes tener un trastorno de ansiedad (o cualquier otro tipo de problema), es preferible que busques ayuda profesional. Son muy habituales y los expertos saben diagnosticar y aplicar soluciones que mejoran considerablemente la calidad de vida de las personas que los padecen. No obstante, es preciso mantener la calma y confiar en los especialistas.
Muchas gracias por leer este artículo. Si te has quedado con alguna duda sobre qué es la ansiedad o cualquier asunto relacionado con ella, no dudaremos en responder tus preguntas. También te animamos a comentar si deseas hablar sobre tu caso o realizar alguna otra aportación.
Redactora con formación en diversas áreas como la psicología, la sociología y la comunicación. Especialmente interesada en psicología social.