Brote Psicótico: Qué es, causas, detección y cómo actuar ante una psicosis
Un brote psicótico es un episodio en el que el juicio de realidad está gravemente afectado. No solo aparece en el curso de una enfermedad grave, como la esquizofrenia, sino también como consecuencia a episodios emocionales que nos sobrepasan. Descubre cómo detectar si estamos ante un brote psicótico y cómo actuar en este artículo
¿Qué es un brote psicótico?
Las personas que sufren psicosis son incapaces de distinguir la experiencia personal subjetiva de la realidad del mundo exterior. Digamos que es una pérdida de contacto con la realidad. Experimentan alucinaciones y/o ideas delirantes que creen que son reales. Es posible que se comporten y comuniquen de forma inapropiada o incoherente.
La psicosis, o episodios psicóticos pueden aparecer como síntoma de un gran número de trastornos mentales, como del estado de ánimo y el trastorno de la personalidad. También es un criterio definitorio de los trastornos del espectro de la esquizofrenia.
¿Cuáles son las causas de un brote psicótico?
No hay un factor único para la aparición de un brote o episodio psicótico. Puede ocurrir por factores biológicos y/o psicosociales.
- Factores biológicos: como anormalidades genéticas, deterioro cerebral por el abuso de sustancias, como el consumo de marihuana.
- Factores psicosociales, por ejemplo la migración. Se cree que el estrés que provoca mudarse a un país diferente influye en la susceptibilidad de padecer trastornos psicóticos. La necesidad de ajustarse a un ritmo de vida diferentes y las desigualdades sociales provocan estrés. Si no se maneja bien puede desembocar en todo tipo de patologías.
Síntomas de un brote psicótico
La psicosis se caracteriza de los siguientes síntomas
- Delirios: son pensamientos acerca de situaciones o hechos que la persona percibe como reales pero son claramente falsos.
- Alucinaciones: consiste en ver, oír, oler, saborear o sentir cosas que no están ahí. Las más típicas son las auditivas, y menos frecuentes, las visuales. En algunos casos las alucinaciones pueden implicar varios sentidos.
- Pensamiento y discurso desorganizado: las personas psicóticas, especialmente las que tienen esquizofrenia suelen presentar un discurso o un habla incoherente y sin sentido. Su pensamiento puede seguir un hilo incoherente, saltando de un tema a otro sin relación alguna.
- Conducta desorganizada o catatónica: los pacientes catatónicos reaccionan de forma poco apropiada a su entorno. Esta forma de relacionarse puede ser, o bien quedándose rígidos e inamovibles o bien con una excesiva actividad motora. Esta conducta suele ser inapropiada o impredecible.
- Baja motivación y apatía. Algunos pacientes pueden sentir apatía y permanecer en un estado letárgico.
¿En qué trastornos aparece la psicosis?
Los brotes o episodios psicóticos puede aparecer en los siguientes trastornos:
- Trastorno psicótico breve
- Trastorno esquizofreniforme, Esquizofrenia, trastorno esquizoafectivo
- Trastorno delirante
- Trastorno psicótico debido a una afección médica
- Trastorno psicótico inducido por sustancias o medicamentos
- Trastorno bipolar
1- Esquizofrenia, trastorno esquizofreniforme, trastorno esquizoafectivo
Todos estos trastornos son similares a la esquizofrenia y suelen ser trastornos duraderos, que afectan gravemente a la vida diaria de quienes los padecen. La manifestación de estos trastornos es muy diversa, por eso se consideran trastornos del espectro de la esquizofrenia. Sin embargo, tienen características comunes. En los brotes psicóticos se pueden dar delirios, alucinaciones, otras consecuencias son la pérdida de motivación, interés y habilidades sociales, ausencia de expresión emocional, trastornos motores (hiperactividad, agresividad o inmovilidad).
El trastorno esquizoafectivo comparte características de la esquizofrenia y del trastorno bipolar. Descubre aquí cómo ayudar a una persona con esquizofrenia.
Sus causas: Se cree que en estos trastornos la causa se relaciona con ciertas anormalidades en la estructura química del cerebro y relacionado con la genética. Sin embargo, el curso y la severidad de estos trastornos depende mucho de factores psicosociales, como estrés y falta de apoyo familiar.
2- Trastorno delirante
En este trastorno son las ideas delirantes la característica principal y en muchos casos, la única. Suele basarse en una única idea delirante, resistente a cualquier argumento lógico. Por ello es muy difícil convencerles de que necesitan tratamiento psicológico.
Sus causas: Las causas exactas de este trastorno no están consensuadas, pero es posible que tenga un componente hereditario. También tiene que ver con anormalidades neurológicas y cambios en la química cerebral. Algunos estudios apuntan a anormalidades en el sistema límbico del cerebro, un área relacionada con la regulación y expresión emocional.
Es más probable que se relacione en personas aisladas, con dificultades con el lenguaje o con diferencias culturales.
3- Trastorno psicótico breve
El trauma y el estrés pueden causar episodios psicóticos de corta duración (de menos de un mes). Eventos que supongan un cambio de vida como la muerte de un miembro de la familia o un desastre natural, pueden favorecer la aparición de estos trastornos en pacientes que no tienen un historial de trastornos mentales.
4- Trastorno psicótico debido a una condición médica
5- Trastorno psicótico inducido por sustancias
Se sabe que la psicosis puede ser un efecto secundario del uso y abuso de ciertas drogas, como los alucinógenos, anfetaminas, cocaína, marihuana e incluso alcohol.
Algunos medicamentos, como los esteroides, fármacos para la quimioterapia, para el parkinson, pueden inducir síntomas psicóticos. También sustancias tóxicas como el monoxido de carbono.
6- Trastorno psicótico compartido
El trastorno psicótico conocido es un trastorno delirante bastante poco común. Implica a dos o más personas con fuertes lazos emocionales.
En occidente suele implicar a dos hermanos o marido y mujer. Mientras que en Japón suele implicar a un progenitor y su hijo o hija. También es posible que implique a toda la familia nuclear.
7- Trastorno bipolar
Las personas con trastorno bipolar se suelen mover entre dos fases cíclicas, la fase maníaca (que se caracteriza por una gran euforia) y la fase depresiva (caracterizada por sentimientos negativos de inutilidad, desesperanza, tristeza…).
Los síntomas psicóticos pueden aparecer en ambas fases del trastorno. Las mujeres con trastorno bipolar también pueden presentar la llamada psicosis postparto, una condición mental poco conocida y poco tratada pero que puede poner en peligro el vínculo madre e hijo.
¿Cómo detectar un psicosis en adolescentes?
Se estima que un 3 % de las personas experimentan psicosis al menos una vez en su vida. Si el episodio aparece durante la adolescencia, puede resultar difícil para padres, cuidadores y profesores detectarlo. La adolescencia es una época de altibajos emocionales. Generalmente se espera que los adolescentes tengan cierta conducta errática, extraña y sin sentido aparente. Sin embargo, ciertos signos nos pueden indicar que existe algún brote psicótico o problema de salud mental:
- Repentinos e inexplicables problemas académicos
- Sospechas hacia otros sin razones lógicas
- Un declive de la higiene personal
- Falta de sentimientos de expresión emocional
- Intensas y repentinas explosiones emocionales sin razón aparente
- Escuchar voces que no están ahí o pensar que ruidos son realmente voces
- Obsesión repentina con nuevas ideas
Alguno de estos signos aislado no es nada de lo que preocuparse. Sin embargo, si aparecen varios es un posible indicador de problemas de salud mental y hay que contactar a un profesional cuanto antes.
¿Psicólogo o psiquiatra? ¿A cuál acudimos? Compruébalo aquí.
¿Se puede prevenir un brote psicótico?
Un grupo de investigación de la Universidad de Adelaide, en Australia han creado una nueva forma de predecir el riesgo de un episodio psicótico con un 70% de exactitud. Este nuevo modelo combina el historial médico, la última evaluación clínica de cabecera, y biomarcadores de ácidos grasos para determinar el riesgo de un paciente de experimentar un brote psicótico.
Según los investigadores, los ácidos grasos (como los omega-3 y los ácidos nervónicos) son esenciales para el normal funcionamiento del cerebro. Además niveles bajos de estas sustancias se han asociado a un mayor riesgo de desarrollar psicosis en grupos de alto riesgo.
Según otro estudio, la prevención se puede realizar mediante la evaluación de tres marcadores o “biotipos”. Uno relacionado con la atención visual, otro el ruido cerebral (actividad cerebral aleatoria, sin función)
¿Cómo tratar un brote psicótico?
Los tratamientos para la psicosis suelen ser una combinación de:
- Medicación antipsicótica, lo que suele aliviar los síntomas de la psicosis, sobre todo actúan muy eficazmente contra los delirios y las alucionaciones.
- Terapias psicológicas, como terapias cognitivo conductual individuales, que ha demostrado ser eficaz con pacientes con esquizofrenia. En algunos casos también puede ser útil la terapia familiar, eficaz a la hora de reducir la necesidad de tratamiento hospitalario y reducción de las recaídas.
- Apoyo social, apoyo a las necesidades sociales, como educación, empleo y alojamiento, y tener una red de apoyo de familiares y amigos es esencial en la mejora del pronóstico de cualquier tipo de patología mental.
Dependiendo de qué trastorno estemos hablando, el pronóstico será mejor o peor. Por ejemplo, los pacientes con episodios psicóticos breves suelen recuperarse en poco tiempo. Sin embargo pacientes con esquizofrenias graves y brotes psicóticos recurrentes tienen mucho peor pronóstico. Por ello un diagnóstico temprano es esencial para mejorar la evolución y la recuperación de estas personas.
¿Qué hacer si un familiar está pasando por un brote psicótico?
Con toda esta información será más fácil detectar un episodio psicótico. Pero ahora la pregunta es ¿qué hago yo si un amigo o familiar cercano está pasando por uno? ¿Cómo le ayudo? ¿La psicosis está relacionada con violencia?
Dependiendo de la gravedad del trastorno, puede que la persona no sea capaz de llevar a cabo una conversación coherente. Y si hay delirios o alucinaciones, es muy probable que no reconozca que aquello que está diciendo y pensando no es cierto. Por ello, en estos casos graves es mejor no discutir y buscar ayuda profesional inmediatamente. Sobre todo si hay riesgo de que dañe a alguien o a sí mismo.
Si el contacto con la realidad no está tan dañado y la persona es capaz de mantener un discurso más o menos lógico, podemos intentar redirigir sus pensamientos en una discusión calmada. Es muy importante no confrontarle directamente, sino ofrecerle nuestra opinión. Decirle que se equivoca puede fortalecer sus delirios. Tampoco podemos seguirle la corriente, porque eso también puede fortalecerlos. Durante los momentos de lucidez o recuperación se amable pero honesto.
También es esencial no hablar del problema de manera que sienta que el trastorno mental es algo de lo que avergonzarse.
Es importante saber que rara vez uno pierde repentinamente el control total de su mente o sus emociones, y que la mayoría de veces hay indicios de que la persona va a tener un brote (falta de sueño, explosiones de mal humor, desconfianza…)
Durante una crisis la persona está estresada y muy asustada. Las voces o alucinaciones puede llegar a ser terribles e incluso pueden impulsarla a actuar conforme a ellas, dañándose o dañando a otros.
¿Qué hacemos?
- No discutimos ni confrontamos sus delirios o alucinaciones.
- Si la persona tiene algún momento de lucidez, podemos, desde nuestra opinión, intentar hacerle ver que eso no es cierto.
- No le gritamos ni amenazamos.
- Ante todo, mantenga la calma.
- No le critique ni regañe
- Evita el contacto visual directo y continuo con esta persona. Tampoco le toque. Esto puede alterarle aún más.
- Si te pide algo, mientras no sea algo peligroso, concédeselo.
- Si lo cree necesario, aléjalo de todo lo que le pueda dañar (objetos afilados, de cristal, ventanas…)
- No le de ultimátums para que acceda a ser hospitalizado.
- Empatiza con él, trata de entenderle y muéstraselo “no me imagino lo mal que lo estás pasando” “Tiene que ser muy duro”.
- Es importante que no te tomes personalmente aquello que la persona le diga durante un episodio agudo.
- Es cierto que si, en un momento agudo, la integridad de las personas está en riesgo hay que llamar a urgencias y hospitalizar al paciente inmediatamente, por seguridad. Pero siempre que sea posible, intenta convencerle para que acceda a recibir ayuda profesional. No le juzges ni le obliges.
Psicóloga General Sanitaria, experta en terapia sexual y de pareja. Ayudo a mejorar la calidad de vida de las personas mediante terapia psicológica y la comunicación a través de la red.